Huelga de transportistas
Segunda semana de huelga y los transportistas siguen indignados con los precios desorbitados a los que se encuentran los combustibles debido a que podríamos considerar que éste es su instrumento de trabajo. Esta huelga afecta a muchos sectores ya que, aunque no te dediques a la distribución, las empresas o autónomos que sí lo hacen han parado los camiones y furgonetas para protestar y así presionar al Gobierno a que fuercen la reducción de precios.
Además de protestar por el alto precio del carburante, los transportistas también reclaman otras condiciones como obligar a que el pago se realice en un plazo máximo de 30 días, una sanción en caso de incumplimiento, limitar la intermediación en el contrato de transporte a un solo contratista y una ley que les prohíba la carga y descarga de la mercancía ya que esa no es su labor.
Las empresas ya han empezado a anunciar las consecuencias que está teniendo esta huelga de transportistas. Muchos ganaderos están teniendo problemas para recibir el alimento de los animales y, a su vez, enviar los productos que generan los animales como, por ejemplo, la leche. Debido a su poca duración, se están viendo obligados a deshacerse de esa leche a la que no han podido dar salida.
En la línea de este problema, los supermercados están teniendo problemas para recibir muchos productos, sobre todo, la leche. Es verdad que, en muchas ocasiones, el hecho de no encontrar ciertos productos en los supermercados se ha producido por la alarma creada en la sociedad y las personas que han decidido comprar más de lo necesario "por si acaso".
Esos "por si acaso" causan un consumo no previsto en los lineales y las personas que van a comprar después se quedan sin alimento. En algunas comunidades, muchas empresas están parando su producción a causa de falta de materias primas o elementos esenciales del proceso.